lunes, 25 de septiembre de 2017

ME AMO COMO DIOS ME HIZO


Del único que dependo es de Dios, mis emociones no deben ser afectadas por algo o por alguien, conozco que valgo como mujer, siempre busco dar lo mejor de mí en mis relaciones, me valoro por lo que soy y por lo que Él continuamente hace en mí.
Dios, en ti confía mi corazón, sé que tú lo guardas y proteges, gracias te doy, mi Padre Celestial, porque tú eres y serás siempre mi primer lugar y yo la niña de tus ojos que cada día se maravilla más de lo que haces en mí, que mi corazón, mi mente y mis pensamientos se llenen de ti. Soy única, un tesoro y nada ni nadie hará cambiar mi forma de ser y de pensar ya que cada día tú te perfeccionas más en mí. Ahora te pido que me sigas dando sabiduría, pasión y amor, en todo lo que me permitas vivir en la tierra, sé que algún día estaré contigo contemplándote y contando las estrellas en el cielo.
Gracias por hacer de mí una

…MUJER FUERTE…

Esto va dirigido a todas las mujeres que piensan que no valen nada, no se valoran, ni se respetan, piensan que llamando la atención de un hombre las hace sentir especiales o se la pasan comparándose con otras mujeres, generando envidia y celos. Yo quiero decirles que para Dios todas ustedes son muy especiales son un tesoro único de Dios así que no se comparen, porque al ver el brillo de la otra persona pueden opacar su propio brillo, cada una de nosotras somos hermosas flores pensadas hace mucho tiempo, antes que la tierra fuera hecha. No dependas de un hombre para saber lo especial que eres para que luego te pisotee, por favor mírate al espejo y sonríe porque Dios te ama y eso es suficiente, no digo que entonces estar sola es mejor, solo digo que esperes en el tiempo de Dios a la persona que Dios tiene para ti, porque esa persona, así como Dios, se dará cuenta de lo única y especial que eres, porque no te mirara con ojos humanos, si no que te mirara con los ojos de Jesucristo. 
Jesucristo vino a esta tierra a restaurar la creación y eso nos incluye a nosotras, a que hubiera una reconciliación con la mujer porque en su palabra dice:

“Y pondré enemistad entre tú y la mujer, y entre tu simiente y su simiente; él te herirá en la cabeza, y tú lo herirás en el calcañar.”
Génesis 3:15 (LBLA)


Este versículo es una de las primeras profecías que habla que la simiente de la mujer “…lo herirás en el calcañar…”. La simiente es Jesucristo y aplastó a Satanás en el momento que venció la muerte en la cruz. Para reconciliarse no solo con el hombre sino también con la mujer, por eso utilizo a María, sierva de Dios, como instrumento de este maravilloso milagro, porque así como la mujer fue engañada por esa serpiente que era satanás, Dios la utilizó luego para su gloria y para que hubiera esa reconciliación por medio de Jesucristo. En la vida de Jesús también vemos como El habló con diferentes mujeres no juzgándolas si no perdonándolas, así que no temas en ir a la presencia de Dios, Él te escucha y está esperando por ti.